Hoy 1° de agosto se celebra el Día de la Pachamama, festividad creada por los pueblos originarios de América Latina. Pacha, en idioma quechua y aymara, significa tierra, mundo, universo. En esa fecha, y todo el mes de agosto, se realizan ofrendas y diversos rituales de agradecimiento a la Madre Tierra por brindarnos hogar y alimento.
En estos tiempos tan tecnologizados y en donde existe una profunda desconexión con lo natural y orgánico, con los ritmos naturales y con nuestro propio cuerpo-tierra, se vuelve sumamente importante reconectar, tomar consciencia de temáticas medioambientales urgentes, generar cambios de hábitos más amorosos con la Pachamama y sus habitantes, y volver a lo verde.
En este mundo rebalsado de comida industrializada y ultraprocesada, es una revolución “des-normalizar” y reaprender a conectar con nuestro templo, el cuerpo, desde nuevos lugares y formas, y defender a la Tierra, nuestra casa.
La Pachamama nos necesita. La destrucción de ecosistemas, los incendios forestales, la depredación y envenenamiento del mar, las pandemias de origen zoonótico, la deforestación, el cambio climático, las megaminerías y la polución del aire, la agricultura y ganadería destructiva están necesitando de nuestra atención y profunda reflexión en este día. Nuestra acción colectiva y nuestros cambios de hábitos pueden ayudar en el aquí y ahora.
Estamos tomando conciencia de que ya no somos meras espectadoras y que nuestra participación en temáticas colectivas, que involucran el cuidado de la Tierra y sus aguas, vegetación y animales es también una labor compartida.
Cada granito de arena termina formando una vasta playa, y si comenzamos a cambiar hábitos podemos colaborar para dejar un planeta más verde y sano.
Hábitos “verdes” para volver a conectar con la tierra
Estas son algunos consejos fáciles que impactan positivamente en el medio ambiente:
- Consumir responsablemente el agua. No dejar canillas abiertas y no darnos duchas tan largas. Elegir un filtro de agua en casa por sobre el agua envasada.
- Elegir emprendimientos sustentables, no testeados en animales y ecofriendly, en vez de los industriales que usan y abusan de plásticos y químicos, ejerciendo el gasto consciente, es decir, invirtiendo en empresas que queremos que crezcan.
- Tratar de no consumir animales o sus derivados. La industria ganadera es responsable de gran parte de las emisiones contaminantes que destruyen el ecosistema. Por otro lado, es cruel financiar la explotación y la muerte de animales inocentes habiendo otras opciones. Considerá el veganismo.
- Evitar el uso de plásticos, llevar nuestra bolsa de compras.
- Consumir sustentablemente: elegir frutas y verduras de estación y de producción local.
- Volver a las botellas de vidrio.
- Usar productos de limpieza biodegradables y concentrados.
- Reciclar ropa, para hacer trapos de piso y paños de limpieza.
- Hacer compost con los desechos orgánicos.
- Ser más minimalistas.
- Comprar ropa creada de fuentes éticas, y con colorantes y telas sustentables.
- Usar papel reciclable.
- Imprimir menos cosas y solicitar recibir las facturas electrónicas.
- Si tenemos lugar en casa, podemos crear una huerta orgánica.